En los últimos años, se ha producido una mejoría importante en el pronóstico del lupus eritematoso sistémico gracias a las nuevas estrategias de abordaje de la enfermedad, al mejor uso de glucocorticoides e inmunosupresores, al uso sistemático de hidroxicloroquina, al empleo de terapias biológicas dirigidas contra células B en los casos refractarios y al control adecuado de las comorbilidades.
Un artículo publicado en el último número de la revista Medicina Clínica presenta una revisión de los principales avances en lupus eritematoso sistémico en los últimos años, específicamente, los nuevos criterios de clasificación, la búsqueda de biomarcadores y las estrategias actuales de abordaje y tratamiento.
Se plantean algunas refllexiones frente a los criterios de clasificación propuestos por la Liga Europea de Reumatología y el Colegio Americano de Reumatología, haciendo énfasis en el hecho que tienen como objetivo seleccionar pacientes homogéneos para estudios de investigación, pero no están validados para su aplicación en casos individuales en la práctica clínica.
Dentro de la búsqueda de nuevos biomarcadores que contribuyan al diagnóstico de la enfermedad, se destaca el posible papel de los anticuerpos (Ac) anti-DFS70, no tanto por su valor diagnóstico, sino por su posible utilidad para descartar los diagnósticos diferenciales del cuadro.
En la búsqueda de un marcador equiparable a la biopsia renal se han evaluado biomarcadores séricos y urinarios, entre los que se incluyen la lipocalina asociada con gelatinasa de neutrófilo (uNGAL), el inductor débil de apoptosis similar al factor de necrosis tumoral (TWEAK), la molécula de daño renal - 1 (KIM-1), la proteína quimioatrayente de monocitos - 1 (MCP-1)y el recuento de linfocitos T urinarios, entre otros.
En cuanto al tratamiento, se mantiene el tratamiento basado en objetivos terapéuticos (estrategia treat to target ), mediante el cual se busca inducir la remisión clínica mantenida o un estado de baja actividad inflamatoria de la enfermedad, lo que significa que todo tratamiento tiene que estar dirigido a conseguir los resultados prefijados de antemano, en el menor tiempo posible.
Referencia
Narváez J. Lupus eritematoso sistémico 2.020. Medicina Clínica. 2020; 155 (11): 494 - 501
Resumen disponible en
https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0025775320303250