La relación entre el uso de antipsicóticos y el desarrollo de tromboembolismo venoso se describió en la década de 1950, encontrándose una asociación positiva en estudios epidemiológicos posteriores, los cuales han sido controvertidos por el amplio rango del riesgo y los hallazgos de investigaciones recientes, en el sentido contrario.
Un artículo publicado en la edición de febrero de la revista Psychiatry Research, presenta los resultados de un meta análisis, llevado a cabo con el objetivo de evaluar la asociación entre la utilización de fármacos antipsicóticos y el riesgo de aparición de tromboembolismo venoso, incluyendo bibliografía actualizada.
Fueron seleccionados 22 estudios, catorce de casos y controles y ocho de cohortes, encontrándose que el uso de antipsicóticos se asocia con un mayor riesgo de tromboembolismo venoso y embolismo pulmonar, condición equivalente para los fármacos de primera y segunda generación.
Los antipsicóticos de primera generación de baja potencia tienen un mayor riesgo de tromboembolismo venoso que los de alta potencia, siendo tres veces mayor la probabilidad de desarrollar esta complicación en pacientes jóvenes que en ancianos, por lo que se recomienda una valoración del riesgo individual previa al inicio del tratamiento.
Referencia
Di X, Chen M, Shen S, Cui X. Antipsychotic use and Risk of Venous Thromboembolism: A Meta-Analysis. Psychiatry Research. 2021; 296: 113691.
Disponible en
https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0165178120333527